El
Quijote de Cervantes es un océano de fantasía y de lenguaje y de creatividad, y
si llevamos a niños que no saben nadar al océano, tenemos que ponerles flotador
y manguitos, y tenemos que adecuar la temperatura del agua, e incluso bajar el
nivel de las olas, para que no les arrastren, para que se sientan confortables,
en el océano...
El Pequeño Quijote trata de conectar con las niñas y los
niños, a través de un lenguaje cercano a ellos, introduciendo elementos
narrativos que tratan de hacerles
asequible y amena la historia, pero respetando el carácter de los
personajes, la desbordante fantasía de la trama, y los contenidos clave
implícitos en la novela.
A
través de títeres y actores, se articula este divertido texto, en el que
Quijotín y Sanchillo son dos chicos que revivirán algunas de las más
importantes aventuras del clásico cervantino: la aventura de los molinos, el
bálsamo de Fierabrás, el encantamiento de Dulcinea, la ínsula de Barataria, el
retablo de Maese Pedro, el yelmo de Mambrino, el caballo Clavileño, el gigante
Pandafilando, la princesa Micomicona...
Y en su mirada infantil está también el humor, la exaltación de la
amistad y el espíritu aventurero, que presidían las andanzas del caballero
manchego.
ESCENAS:
Capítulo
1. Presentación del pequeño Quijote.
Capítulo
2. La primera salida del pequeño Quijote.
Capítulo
3. Quijotín en el camino.
Capítulo
4. La segunda salida de Quijotín y la presentación de Sanchillo.
Capítulo
5. La aventura de los molinos.
Capítulo
6. El bálsamo de Fierabrás.
Capítulo
7. El yelmo de Mambrino.
Capítulo
8. La tercera salida del pequeño Quijote y el encantamiento de Dulcinea.
Capítulo
9. La Princesa Micomicona y el Gigante
Pandafilando.
Capítulo
10. El retablo de Maese Pedro y otras extrañas aventuras.
Capítulo
11. El caballo Clavileño.
Capítulo
12. La ínsula de Barataria.
Capítulo
13. El fin del pequeño Quijote.
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